viernes, 1 de agosto de 2025

Radio social ¿por antena o en Podcast?

Bien y a la Primera

Omar Espinosa

La radio, ese viejo amigo que ha acompañado generaciones, se reinventa hoy en el ecosistema digital y con ella, también la figura del locutor que ha dejado atrás los tiempos de la voz impostada y la formalidad acartonada.

Hoy la autenticidad y la conexión emocional son una verdadera moneda de cambio, donde lo que se recibe de las audiencias es lealtad, así como un seguimiento no solo en cada emisión radial, sino de los contenidos elaborados para redes sociales y por supuesto la tan deseada retroalimentación constante que permita a los profesionales de la voz observar qué aspectos puede y debe mejorar, cambiar o eliminar.

En México, la radio social vive un crecimiento a considerar, pues se han convertido en medios de comunicación que buscan empoderar a sus comunidades, fomentando la participación ciudadana y la expresión de voces diversas. Su programación se centra en temas de interés social, cultural y educativo, alejándose de los formatos comerciales para promover la reflexión, el diálogo y la identidad local.

Con la radio social y a través de proyectos comunitarios, universitarios y de plataformas digitales, se construye una red de voces que reflejan la diversidad del país.

Existen iniciativas que exploran formatos experimentales y temáticas de interés social y cultural, atrayendo audiencias jóvenes que buscan contenidos frescos,  alternativos y aprovechando la posibilidad de instalar estaciones de radio por internet, haciendo que el crecimiento de estas radiodifusoras digitales registre un incremento de más del 30% en los últimos dos años, según datos reflejados en instrumentos de medición del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) en su Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH).

Por si aún había duda, la radio no solo sobrevive, sino que se adapta y expande.

Esta evolución ha redefinido el rol del locutor y ha trazado una clara distinción entre la locución para programas de radio convencionales y la destinada a podcast, pues, si bien ambos formatos comparten la necesidad de una voz clara y bien modulada, sus propósitos y dinámicas son diametralmente opuestos.

La locución para la radio tradicional se rige por un ritmo preestablecido, donde se busca una voz que guíe, entretenga e informe de manera fluida, respetando los tiempos de la publicidad, los cortes de noticias y la estructura de un programa en vivo.

En la radio, el locutor es un mediador, un tipo de capitán que conduce a la audiencia a través de un viaje sonoro compartido y la voz se convierte en algo así como un ancla que ofrece continuidad, pero solo en el dial del aparato receptor y en tiempos fijos.

En contraste, la locución para un podcast es un acto de verdadera intimidad, donde el locutor habla directamente al oído del oyente que le ha elegido activamente para escuchar y ser parte de los contenidos sonoros que periódicamente ofrezca en las plataformas de audio digitales.

Aquí se valora la voz natural, con sus pausas y su tono conversacional; no hay presiones de tiempo en tiempo real y el ritmo es orgánico, permitiendo una exploración más profunda de los temas, por parte de los escuchas, quienes además se convierten en participantes activos.

El locutor de podcast no es un capitán, sino un compañero de viaje, un amigo que comparte una historia, un experto que desmenuza un tema complejo, o simplemente alguien que te hace compañía, ahí, en tus audífonos, con música, efectos sonoros, silencios y su voz, esa que parece estar contigo; solo para ti, para nadie más.

La ausencia de interrupciones publicitarias o la libertad de un formato "a la carta" potencian esta sensación de cercanía y autenticidad.

La radio social, en cualquiera de sus formas (en antena o digital), es empatía, autenticidad y conexión; demostrando que la tecnología lejos de deshumanizar, puede  devolver al acto de creación radiofónica, su esencia más profunda: la de contar historias, compartir ideas, mantener viva la conversación, el diálogo y donde la voz humana siga siendo el puente más poderoso entre los seres humanos.

Sigamos Haciendo Radio. ¡Llámalo Podcast!

Spotify: Bien y a la Primera de Omar Espinosa